EL PIE Y LOS CRUCIFICADOS DE SEVILLA
El Santísimo Cristo de la Providencia.
El Oratorio de la Escuela de Cristo (ver) presenta un altar en la cabecera, con
un severo retablo neoclásico de mampostería jaspeado en mármoles de colores.
Lo preside una
imagen del Cristo de la Providencia, obra de Juan de Astorga, policromado por
Juan de Uceda, encargada en el año 1818 y entregado en el año 1820. Sustituyó
al Cristo del Calvario (ver) de Francisco de Ocampo (1611), adquirido a la iglesia de
san Idelfonso y que luego esta reclamó, a cambio de 4000 reales, por lo que la
escuela se vio forzada a encargar el actual que costó 8400 reales.
Francisco Nicolás de la Barrera fue, en nombre
de la Escuela, el que encargó a Juan de Astorga un nuevo Cristo en la Cruz, indicándole que "salga lo más dulce y
sensible que sea dable, con la circunstancia de que el rostro goce bien desde
el pavimento".
Y efectivamente la pieza es de suma belleza y
serenidad acorde con el espíritu neoclásico.
La cara no tiene aspecto dramático, predomina
el aspecto de la bondad de cristo y su amor al horror del martirio de la Cruz, resaltando
la faceta de la entrega de Jesus al género humano y su obediencia al Padre
hasta la muerte, por eso se nos muestra sin dramatismo y siguiendo los cañones
de la escuela sevillana, con solo los signos imprescindibles de la Pasión.
El paño de pureza no se anuda, sino que se
fija sobre un cordel mostrando la cadera derecha.
Presenta
solo tres cavos con los pies fijados juntos, el derecho sobre el
izquierdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario