EL PIE Y LOS CRUCIFICADOS DE SEVILLA
Cristo de la Salud. Capilla de Montesión.
En un retablo barroco, del siglo XVII, restaurado por Benjamín Domínguez
López, situado en el muro lateral del Evangelio de la Capilla de Montesión (ver) se sitúa
la imagen del santísimo Cristo de la Salud, de Ortega Brú, que es titular de la
Hermandad, aunque no procesiona, pero que preside cada año un Vía Crucis. Solamente ha realizado una salida extraordinaria
el 14 de noviembre de 2009, en el paso del Señor de la Oración, con ocasión del
450 aniversario de la fundación de la Hermandad.
Se cree que
la primera imagen fue “El Cristo de la salud o del Coral”, de finales del siglo
XIV, atribuido a Pedro Millán, que actualmente se
conserva en la iglesia del convento de santa Paula, de la orden Jerónima y que
presidió las estaciones de penitencias de la Semana Santa hasta el siglo XVII.
Según el historiador y Hermano Mayor, D. Hilario Arenas, la Hermandad
debió establecerse, a finales del siglo XIV, en el Monasterio de santa Paula, pues
en los Cabildos de 3 y 7 de abril de 1591 se dice: “para el Cristo Crucificado que
es nuestro y está en el dicho convento de las señoras monja”.
Según D. Alberto Ramírez, en 1574 se produjo
el traslado de la Hermandad al Convento de Monte-Sión y una vez en ella, es
otra imagen de crucificado a la que se rinden culto y la que hace Estación de
Penitencia, desde el cabildo de
1590, hasta abril de 1668, en que se decidió suprimir este paso.
Se trata de
una talla, realizado en pasta de madera y con
rasgos indianos con una diadema de plata sobre su cabeza, donada por una hermana de
esta cofradía (Catalina…) desde tierras americanas y
que fue destruido durante el incendio de la capilla en los tristes
acontecimientos de 1936.
Tras el fin de la guerra, el Mayordomo de la Hermandad, Luis Ruiz Muñoz Gallardo,
encargó, pagó y donó a la Hermandad el actual
crucificado a Luis Otega Bru en 1954, que se inspiró en el “Crucificado de la
Conversión”, según consta en el Cabildo de Oficiales de 17 de julio de 1954: “Que
el compareciente ha decidido donar a la Cofradía de la Sagrada Oración en el
Huerto y María Santísima del Rosario…….una
imagen del crucificado de su propiedad, previamente bendecida por el Director Espiritual
de la Hermandad Fray Buenaventura de C vega de la que es autor el imaginero D.
Luis Ortega Brú”.
Se trata de una
imagen realizada en madera de ciprés, que mide dos metros de extremos de pies a
cabeza y uno noventa de mano a mano, que presenta una actitud expirante con el
pecho alzado y la espalda separada del Santo Madero, inspirada en
el Cristo de la Conversión del Buen ladrón de Montserrat.
Es una obra
conmovedora, de marcados rasgos que muestra una gran expresividad en el tormento
que se desprende de su rostro, con espinas talladas. A Ortega Brú le gustaba
llamarlo “Cristo de las Lágrimas”, quizás por la que vierte unos expresivos
ojos sobre la mejilla derecha.
Ortega Brú, decía: Todas mis esculturas son desgarros. Mi arte es la
expresión del alma de mis amigos que ha muerto luchando por un ideal. Son como
sueños torturados (…). Los que me tachan de duro no saben que no puedo vender
mi arte a los que solo quieren ver reflejados muñecos bonitos (….) el Cristo es
como un grito desgarrado”.
Representa a un Cristo vivo sujeto a la cruz arbórea por tres calvos con
un sudario sujeto por soga anudado en el lado derecho dejando visible la casi
totalidad de la pierna.