viernes, 28 de abril de 2023

 EL PIE Y LOS CRUCIFICADOS DE SEVILLA

Cristo de la Salud. Capilla de Montesión. 

Retablo del Cristo de la Salud

En un retablo barroco, del siglo XVII, restaurado por Benjamín Domínguez López, situado en el muro lateral del Evangelio de la Capilla de Montesión (ver) se sitúa la imagen del santísimo Cristo de la Salud, de Ortega Brú, que es titular de la Hermandad, aunque no procesiona, pero que preside cada año un Vía Crucis. Solamente ha realizado una salida extraordinaria el 14 de noviembre de 2009, en el paso del Señor de la Oración, con ocasión del 450 aniversario de la fundación de la Hermandad.  

Se cree que la primera imagen fue “El Cristo de la salud o del Coral”, de finales del siglo XIV, atribuido a Pedro Millán, que actualmente se conserva en la iglesia del convento de santa Paula, de la orden Jerónima y que presidió las estaciones de penitencias de la Semana Santa hasta el siglo XVII.


Retablo del Cristo del Coral en la Iglesia del Convento de santa Paula

Según el historiador y Hermano Mayor, D. Hilario Arenas, la Hermandad debió establecerse, a finales del siglo XIV, en el Monasterio de santa Paula, pues en los Cabildos de 3 y 7 de abril de 1591 se dice: “para el Cristo Crucificado que es nuestro y está en el dicho convento de las señoras monja”. 

Cristo Crucificado cubierto con un cristal que dificulta la fotografía

Detalle del rostro

Detalle  del paño de pureza

Detalle de los pies

Según D. Alberto Ramírez, en 1574 se produjo el traslado de la Hermandad al Convento de Monte-Sión y una vez en ella, es otra imagen de crucificado a la que se rinden culto y la que hace Estación de Penitencia, desde el cabildo de 1590, hasta abril de 1668, en que se decidió suprimir este paso.

Se trata de una talla, realizado en pasta de madera y con rasgos indianos con una diadema de plata sobre su cabeza, donada por una hermana de esta cofradía (Catalina…) desde tierras americanas y que fue destruido durante el incendio de la capilla en los tristes acontecimientos de 1936.

Tras el fin de la guerra, el Mayordomo de la Hermandad, Luis Ruiz Muñoz Gallardo, encargó, pagó y donó a la Hermandad el actual crucificado a Luis Otega Bru en 1954, que se inspiró en el “Crucificado de la Conversión”, según consta en el Cabildo de Oficiales de 17 de julio de 1954: “Que el compareciente ha decidido donar a la Cofradía de la Sagrada Oración en el Huerto  y María Santísima del Rosario…….una imagen del crucificado de su propiedad, previamente bendecida por el Director Espiritual de la Hermandad Fray Buenaventura de C vega de la que es autor el imaginero D. Luis Ortega Brú”.

Se trata de una imagen realizada en madera de ciprés, que mide dos metros de extremos de pies a cabeza y uno noventa de mano a mano, que presenta una actitud expirante con el pecho alzado y la espalda separada del Santo Madero, inspirada en el Cristo de la Conversión del Buen ladrón de Montserrat. 

Cristo de la Salud de Ortega Brú

Es una obra conmovedora, de marcados rasgos que muestra una gran expresividad en el tormento que se desprende de su rostro, con espinas talladas. A Ortega Brú le gustaba llamarlo “Cristo de las Lágrimas”, quizás por la que vierte unos expresivos ojos sobre la mejilla derecha.

Ortega Brú, decía: Todas mis esculturas son desgarros. Mi arte es la expresión del alma de mis amigos que ha muerto luchando por un ideal. Son como sueños torturados (…). Los que me tachan de duro no saben que no puedo vender mi arte a los que solo quieren ver reflejados muñecos bonitos (….) el Cristo es como un grito desgarrado”.


Detalle del rostro
Detalle de la lágrima

Representa a un Cristo vivo sujeto a la cruz arbórea por tres calvos con un sudario sujeto por soga anudado en el lado derecho dejando visible la casi totalidad de la pierna. 

Detalle del paño de pureza

Las manos crispadas fijadas por las palmas


Detalle de las manos

Y los pies fijados con un solo calvo, con el pie derecho sobre el izquierdo. 

Visión frotal de los pies

Visión lateral de los pies