domingo, 16 de abril de 2023

 EL PIE Y LOS CRUCIFICADOS DE SEVILLA

El Santísimo Cristo del Mayor Dolor. Iglesia de san Lorenzo. 


En el muro de la izquierda, de la capilla de la Hermandad del Dulce nombre, de la iglesia de san Lorenzo (ver)se sitúa un Crucificado, el Santísimo Cristo del Mayor Dolor. 

Es un crucificado considerado inicialmente como obra anónima del siglo XVII, que no sale en estación de penitencia.

Su talla ha sido atribuida indistintamente al hispalense Juan de Oviedo y de la Bandera, el Mozo, y al jienense Andrés de Ocampo, pero en la publicación que ha editado la hermandad con motivo del centenario de su reorganización, el historiador del arte Rafael J. Ríos Delgado la considera obra de Andrés de Ocampo, basándose en el análisis formal y estilístico realizado con motivo de la restauración y en la comparación con otras tallas, tanto de Oviedo como de Ocampo. 

A la misma conclusión ha llegado la comisión de expertos que ha guiado la restauración, compuesta por historiadores de reconocido prestigio, como Andrés Luque Teruel, Guillermo Martínez Salazar, Francisco Ros González o Alicia Iglesia Cumplido.

Es una escultura de bulto redondo realizada en madera de ciprés policromadade tamaño algo menor que el natural, concretamente de 1’40 metros de altura, de estilo manierista, que representa a Cristo crucificado y muerto, sobre una cruz arbórea tallada por el desaparecido Taller Isbilia en 1985 (Carrero dice en sus Anales que la realizó el escultor Augusto Morillas).

Su frontalidad nos habla de que la escultura, aunque posteriormente a su creación fuera procesional, se realizó para culto en capilla, ya que el mejor punto de vista de la escultura, sobre todo del rostro, es desde abajo y frontal.

La cabeza del crucificado cae sobre su costado derecho, es un rostro alargado con una cabellera con raya en medio que se une a la barba bífida y bigote. 

La boca cerrada en un gesto amargo cuyo labio inferior es más grueso. 

Los ojos, entreabiertos y con la mirada perdida, enmarcados en unas finas cejas muy perfiladas que marcan mucho la curvatura con lo que aumentan la sensación de dulce patetismo arcaizante.

El cuerpo doblando en pronunciada curvatura hacia la derecha, responde totalmente a la grandiosidad (aunque es menor que el natural) del manierismo romanista, con una ejecución en la que se conjuga el conocimiento de la anatomía con el gusto por los cuerpos apolíneos de tradición grecorromana, constituyendo una talla robusta y de gran fuerza anatómica, con claras y evidentes influencias del arte de Miguel Ángel. 

El paño de pureza es muy innovador dentro de este primer comienzo de la escuela sevillana. Presenta pliegues abultados, con moña y apertura lateral izquierda, que deja ver parcialmente descubierta la cadera con una tosca cuerda.  

El cristo está fijado a la cruz arbórea mediante tres clavos, un solo clavo para los dos pies, el derecho sobre el izquierdo.

Actualmente, la imagen ocupa el altar mayor de la capilla al ser dispuesto los demás titulares de la Hermandad en el Altar Mayor de la Iglesia.