domingo, 7 de diciembre de 2025

EL PIE Y LA PASION DE CRISTO EN LA PINTURA

CRUCIFIXIÓN 

Calvario. Luis de Vargas. Catedral de Sevilla.

Calvario con donantes. Luis de Vargas.1560. Óleo sobre lienzo. Sacristía de los Cálices. Catedral de Sevilla


En la catedral de Sevilla se encuentra otra importante obra de Vargas, a pesar de su pequeño tamaño; se trata de una tabla que representa “El Calvario”, en la cual aparece la firma del artista. Aunque no está fechada, por su estilo puede datarse hacia 1560 y en ella el crucificado aparece sobre un fondo de tinieblas con la Virgen y san Juan al pie, a los que acompaña la presencia de un anónimo clérigo que será el donante de la pintura y que está acompañado por san Francisco.

Por Andrés Carranza Bencano

 CALZADO 

Retablo del Nacimiento de Cristo. Luis de Vargas.

Retablo del Nacimiento de Cristo. Vargas, Luis de. 1552-1555. Catedral de Sevilla

Además de la escena principal del Nacimiento de Cristo, el banco del retablo incorpora tres composiciones menores con la Anunciación, la Presentación y la Adoración de los Reyes, mientras que los laterales están ocupados por los cuatro evangelistas.

La composición, con el Niño desplazado hacia la izquierda, revela recursos propios del arte veneciano; y la joven con un niño que asoma a la derecha muestra una clara afinidad con el estilo de Tiziano. El grupo formado por la Virgen, el Niño y san José es más tradicional, pero resulta fundamental para comprender la evolución posterior de la pintura andaluza.

Grupo formado por la Virgen, el Niño y san José

La joven con un niño que asoma a la derecha

Destacan también los dos pastores situados en primer término. La cabeza del pastor que carga con el cabrito y sujeta a la cabra por los cuernos es, posiblemente, una de las representaciones más logradas y bellas del Renacimiento en Sevilla. Lleva una túnica roja como símbolo de la sangre derramada y representa al precursor de San Juan Bautista con el “cordero divino”. Si añadimos la vivacidad del conjunto —el juego entre la cabra y el niño.

Pastor que carga con el cabrito y sujeta a la cabra por los cuernos y el niño

Destaca la figura del pastor en primer plano, el perro jadeante a sus pies, la gavilla de paja y el cesto de pichones— nos situamos ante una escena que se aleja claramente de lo que cabría esperar de un pintor italiano, salvo quizá en el ámbito veneciano.

Pastor en primer plano, el perro jadeante a sus pies, la gavilla de paja y el cesto de pichones

Destaca la humildad y pobreza de los pastores que se muestra en el calzado del situado en primer plano.

Detalle del Calzado